La mimosa
En ISOLÉE atesoramos una pequeña colección de materias primas de perfumería. Una postal olfativa de nuestras visitas a Grasse que hemos traído para nuestro recuerdo, encapsulando en frascos de laboratorio algunas de las materias primas sintéticas y naturales que más se utilizan en perfumería.
La primera joya que abrimos hoy es el frasco que contiene el Absoluto de Mimosa. Una flor prácticamente desconocida que marca el inicio del año en Grasse. El olor anisado del Absoluto de Mimosa nos traslada al Valle del Tanneron, a media hora de Grasse. En Enero, este valle se tiñe de reflejos dorados durante la floración de las Mimosas. Al recorrer el valle a pie, para poder apreciar todas las facetas del olor cautivador de estas flores delicadas, es preciso acercarse mucho a ellas. Sin embargo, en una estancia cerrada, el olor que desprende un ramo de Mimosas invade intensamente, de forma casi narcótica, todos sus rincones.
En perfumería, esta flor aporta riqueza y múltiples facetas a los perfumes de los que forman parte. Las Mimosas tienen un aroma verde, anisado y dulce (que recuerda a las Habas Tonka) y aportan una faceta empolvada pero grasa a las fragancias. Su olor es embriagador. Después de oler esta flor, es imposible no sentir predilección por los perfumes que contienen Absoluto de Mimosa. Recientemente en ISOLÉE hemos traído a España un perfume adictivo que contiene esta flor: Sweet Morphine (Morfina Dulce) de la marca parisina EX NIHILO. Se trata de una fragancia atalcada y dulce. Cada una de las facetas del Absoluto de Mimosa está realzada por la aportación de las demás flores que componen este perfume: las Lilas realzan la faceta verde y floral; el Heliotropo refuerza la faceta atalcada y dulce; la Manteca de Iris subraya las notas empolvadas y a la vez grasas; y la Vainilla de Bourbon envuelve en calidez la composición.